SUFRIMIENTO AMOROSO Y SEXO EN EL ROCK PERUANO: ANÁLISIS SEMÁNTICO PRAGMÁTICO
Número 22 / ABRIL, 2024 (198-208) 200
INTRODUCCIÓN
La lírica de las canciones expone el sentir,
las preocupaciones y los intereses de sus
creadores y oyentes, por lo que “las canciones
más consumidas reejan el sentir mayoritario
del conjunto de la sociedad” (Palomeque &
de Lucio, 2021, p. 95). Asimismo, se emplean
como canales de expresión que maniestan
experiencias comunicativas y representan
problemáticas, malestares y quehaceres de
realidades sociales determinadas (Secul, 2018).
En este sentido, la música es un mecanismo con
el cual una generación se identica, basado en el
contenido de su lírica, ya que posee “articios
retóricos y características propias de la función
poética (…) que abordan problemáticas e
interrogantes sociales” (Secul, 2017, p. 199).
El rock nace como género a mediados del siglo
XX como una forma de entretenimiento para
los jóvenes (Ramet, 2019). Tanto la forma
como el contenido de las letras de este género
han ido cambiando con el pasar de los años,
representando, en cada una de sus etapas, sentires
y preocupaciones de oyentes y creadores. Por ello,
el rock puede ser considerado tanto un fenómeno
cultural como comunicativo, por lo que “ostenta
un rol fundamental en la conformación social
de identidades culturales y representaciones
sociales a través de los mensajes” (Lorenzo &
Vargas, 2012, p. 3).
Las letras de canciones pueden considerarse
discursos, sobre la base de que conforman
una estructura de componentes perceptivos,
estructurales y sociales. En las canciones se
vinculan formas y contenidos, cuyo signicado
varía dependiendo del contexto (Sánchez,
2020). Al respecto, las canciones de rock no
escapan de esta realidad, y se caracterizan por
sus “sistemas genéricos, repertorios tópicos y
reglas de encadenamiento de enunciados que
organizan e instituyen lo narrable (...) en un
contexto determinado” (Secul, 2017, p. 1).
Asimismo, el discurso del rock oscila entre
puntos de vista, perspectivas, enunciaciones
y visiones del mundo. Se caracteriza por
asumir articios propios de la función poética,
y por enunciar valores éticos que abordan
problemáticas sociales. Especícamente, las
palabras en el rock narran, señalan o demarcan
aspectos de una época determinada, por lo que
“las líricas son poseedoras de articios retóricos
y características propias de la función poética”
(Inchaurrondo & Secul, 2019, p. 2). El análisis
lingüístico de esta lírica hace posible profundizar
en la reciprocidad del contenido análogo y los
contextos en los que fue elaborada (Secul, 2018).
En Perú, los movimientos de rock responden a
los contextos económicos, políticos y sociales
por los que atraviesa el país (Cornejo, 2018;
Riveros, 2020). Además, existe una indudable
necesidad de expresión por medio del rock;
muestra de ello es la ingente cantidad de bandas
independientes que surgieron en la década de
los 90 e inicios del 2000 (López, 2020; Melgar,
2020). Por ello, la presente investigación realiza
un análisis de dos artistas representativos del
rock peruano.
EL DISCURSO
El discurso puede entenderse como el empleo
de la lengua para comunicarse, ya sea oralmente
o por escrito (Gardido, 2016; Urdaneta, 2010).
Un discurso está estructurado tanto por la
unión de unas oraciones con otras, como por
grupos fónicos organizados sintácticamente.
A su vez, Van Dijk (2006) lo concibe como un
proceso complejo en sí mismo necesitado de
actores sociales que intervienen en un contexto
especíco, por lo que resulta un constructo social
que pone en funcionamiento representaciones
del ámbito lingüístico con el n de construir
formas comunicativas (Ramírez, 2012).
Por su parte, un discurso aparece en un contexto,
tiene propósito, estructura interna, funciones
especícas y reproduce una realidad (Molero,
2003). Desde la semántica, el discurso involucra
en el hablante los componentes: cognitivo,