REVITALIZACIÓN DE LENGUAS NATIVAS:
REFLEXIONES A PARTIR DE LAS NARRACIONES DE ALGUNOS DOCENTES INTERCULTURALES BILINGÜES
Número 18 / DICIEMBRE, 2022 (65-79) 68
del uso de la lengua, y de la inclusión de los
saberes y conocimientos dentro de los procesos
educativos de los pueblos y nacionalidades.
Como se puede observar, existe un marco
histórico y legal de revitalización de las lenguas
nativas. Sin embargo, ¿se está fortaleciendo su
uso? Para este n analizamos las narraciones de
docentes interculturales bilingües inmersos en la
EIB a partir de sus trabajos de sistematización
de experiencias. Estas sistematizan una serie de
reexiones teóricas y metodológicas, prácticas
en diferentes campos disciplinares y en diferentes
niveles escolares (Ghiso 2019) y evaluaciones
críticas de su práctica de aula.
El tema de revitalización de la lengua nativa
ha sido abordado por números estudiosos en
Latinoamérica. Ospina (2015) reexiona acerca
de la situación sociolingüística de las lenguas
nativas en Colombia. En tanto, Llanquinao,
Salamanca y Teillier (2019) analizan los aportes
de varios estudios en relación con la enseñanza
y el aprendizaje de las lenguas originarias en
Chile, especialmente del mapunzugun. Por otro
lado, Córdova (2015) enfatiza las iniciativas
implementadas ante el peligro de extinción de
las lenguas indígenas en México.
En el contexto ecuatoriano, Chávez, Chenet y
Quispe (2019) describen las estrategias didácticas
para la revitalización de lenguas originarias
en estudiantes de la Universidad Nacional
Intercultural de la Amazonía. A su vez, Torres
et al. (2020) reexionan sobre la problemática
del aprendizaje del kichwa y la revitalización de
lenguas ancestrales. Finalmente, Garcés (2020)
plantea la necesidad de la revitalización de las
lenguas indígenas para la construcción de un
Ecuador intercultural y plurinacional.
En Ecuador la revista Pueblos indígenas y
Educación se ha destacado por su dedicación a
una serie de monográcos sobre revitalización
lingüística, cuyos aportes se enmarcan en
la conservación de la diversidad lingüística
y cultural. Notable resulta el número 64,
donde López, Moya y Abram (2015) acopian
contribuciones en torno a la revitalización de las
lenguas indígenas y su desafío en la educación
intercultural bilingüe; el hogar, la comunidad
y la escuela en la revitalización de las lenguas
originarias de América Latina; la importancia de
la documentación lingüística en la revitalización
de las lengua, entre otras.
Este estudio se aborda desde una postura del
diálogo de saberes, para reconocer la existencia
de una pluralidad de saberes y prácticas (Sousa
2010), que se encuentran invisibilizados. De
hecho, la monocultura del saber se caracteriza
por reconocer al saber cientíco como único,
mientras que otros conocimientos son dejados
de un lado por carecer de rigurosidad y
sistematicidad cientíca (Sousa 2006). De esta
manera, se rompe estructuras disciplinarias
encaminadas al colonialismo intelectual (Lander
2000), y se aleja de la idea de la existencia de
límites entre los conocimientos válidos (cientíco
occidental) y no válidos (Castro 2007).
Desde la perspectiva de Walsh (2010), el
conocimiento cientíco occidental se enmarca
en formulaciones teóricas monolíticas,
monoculturales y universales, que deja de un lado
a los saberes derivados del lugar y producidos
a partir de racionalidades sociales y culturales
distintas. Además, se discute en cómo (re)plantear
el sistema educativo intercultural y bilingüe,
para lo cual se basa en la crítica del modelo
hegemónico sustentado epistemológicamente
desde el saber cientíco occidental, que
constituye una forma de conocimiento único
y verdadero, deslegitimando otras formas de
producir conocimientos (Corbetta et al. 2018).
En el orden de ideas señaladas, emerge la
necesidad de contextualizar el conocimiento
y entender los problemas y las necesidades
de los docentes a partir de las vivencias en
sus espacios de trabajo, particularmente en la
revitalización de la lengua nativa. Este trabajo
consta de cuatro secciones. En la primera se
destaca la problemática, objetivos de estudio,
estado del arte y marco teórico o conceptual.
En la segunda se explica la metodología, que
incluye los materiales y los métodos, sus
procedimientos, el número de participantes y
análisis de la información. En la tercera sección
se muestran los resultados y la discusión a partir