
Mario Javier Carreño Vera, Edwin Fernando Herrera García
CHAKIÑAN. Revista de Ciencias Sociales y Humanidades / ISSN 2550 - 6722
203
Un análisis en mayor detalle, con base en la escala sobre la magnitud
o severidad del impacto del retraso, devela que la mayor parte de
los retrasos (el 70,83 % entre 2022 y 2023) son de menos de 21 días
(moderados o considerables), por lo que, a priori, parecería que la
afectación en la provisión de bienes y servicios no es un asunto de gran
relevancia. No obstante, cerca de la tercera parte de los contratos (27,08
% entre 2022 y 2023) tienen retrasos de más de un mes (críticos), lo que
supondría mayores afectaciones a los ciudadanos beneciarios de esos
bienes y servicios.
Desde luego, para evaluar el nivel de afectación real de estos retrasos
hacia el usuario nal es importante mencionar que la Empresa Manabí
Produce-EP se encarga de ejecutar proyectos encaminados al desarrollo
económico, social y productivo de la provincia de Manabí, a través de
actividades de asistencia técnica, capacitación, sistemas de riego, entre
otras. Por ello, es de suma importancia realizar un examen en detalle de
los procesos de contratación retrasados, sus objetivos, y los productos
y servicios implicados, y la relación de estos con las necesidades o
demandas ciudadanas que estos buscan satisfacer.
Por otra parte, el 25,00 % del total de procesos se retrasa de forma
considerable (entre 11 y 20 días). De forma similar, sus principales
cuellos de botella son las actividades de publicación y recepción de
reformas y el estudio de mercado, que, del tiempo esperado, de entre tres
y cinco días, pasó a doce días, en promedio. En cambio, el 2,08 % del
total de procesos se atrasa de forma severa (entre 21 y 30 días) y el 27,08
% llega a un retraso crítico (más de 30 días). Los procesos atrasados
en estas categorías tuvieron dos cuellos de botella. Uno está entre las
actividades de estudio de mercado y la de reforma al plan operativo
anual, que debería tomar tres días, pero llega a quince, en promedio. Los
retrasos en los procesos de contratación en la etapa de reforma del plan
operativo anual ocurren por la existencia de errores y variaciones en
las operaciones institucionales, cuando no se dene desde el inicio del
año scal la planicación correspondiente con sus respectivas partidas
presupuestarias, lo que conlleva a realizar los cambios necesarios para
poder dar respuesta a los procesos de contratación que se llevan a cabo
en la empresa.
Estas demoras, según los entrevistados, se relacionan con el tiempo
empleado para el ajuste de las partidas existentes, lo que depende del
grado o complejidad del ajuste a realizar. Esto implica que la naturaleza
especíca de los cambios necesarios en las partidas existentes puede
inuir en la duración del proceso de contratación cuando existe
necesidad de reformas de algún tipo.
El otro cuello de botella se encuentra entre las actividades de
certicación de catálogo y las de publicación y recepción de proformas,
que debería tomar cuatro días, pero, en promedio, llega a diez. En este