NEOVANGUARDIAS CINEMATOGRÁFICAS O UN ALCANCE INTERTEXTUAL DE LA POSMODERNIDAD
menciona Lipovetsky:
Los manifiestos rimbombantes de principios
de siglo, las grandes provocaciones ya no se
llevan. Agotamiento de las vanguardias; ello
no significa que el arte haya muerto, que los
artistas hayan perdido la imaginación, ni que
las obras más interesantes se han desplaza- do,
ya no buscan la invención de lenguajes de
ruptura, son más bien ´subjetivas´, artesana-
les u obsesivas y abandonan la búsqueda pura
de lo nuevo; la revolución permanente ya no
encuentra su modelo en el arte. (Lipovetsky
1998:48)
Con la posmodernidad, el arte tiene sentido en la
fragmentación y en la intertextualidad, en la lec-
tura y revisión del pasado, “de ahora en adelante
el arte integra todo el museo imaginario, legitima
la memoria, trata con igualdad al pasado y al pre-
sente, hace cohabitar sin contradicción todos los
estilos” (Lipovetsky 1998:49). Las imágenes se
repiten con un nuevo significado, en algunos ca-
sos con una clara orientación irónica sobre lo que
se quiere exponer al duplicar o visitar el pasado.
Según Foucault las características de la posmo-
dernidad serían: “deconstrucción, descentración,
diseminación, discontinuidad, dispersión. Estos
términos expresan el rechazo del cogito que se ha-
bía convertido en algo propio y característico de la
filosofía occidental, con lo cual surge una obse-
sión epistemológica por los fragmentos” (Focault
1966:179).
Lo propio de la posmodernidad es el eclecticismo,
la reconfiguración contextual acerca de discursos
que ya estaban planteados con anterioridad. Se
hace clara la necesidad estética de lo múltiple, de
lo simultáneo.
Subyace igualmente un rechazo del racionalis-
mo de la modernidad a favor de un juego de
signos y fragmentos, de una síntesis de lo dis-
par, de dobles codificaciones; la sensibilidad
característica de la Ilustración se transforma en
el cinismo contemporáneo: pluralidad, mul-
tiplicidad y contradicción, duplicidad de sen-
tidos y tensión en lugar de franqueza directa.
(Vásquez 2005:153)
NEOVANGUARDIAS
Donald Kuspit hace un símil entre neovanguardia
y posmodernidad, lo mismo con vanguardia y mo-
dernidad (1994:1). Superada la Segunda Guerra
Mundial, varios artistas y movimientos retoman la
estética y las formas de las vanguardias que fueron
tan populares a partir de los años 10 del siglo XX.
La aplicación de las neovanguardias va a tono con
los planteamientos de la posmodernidad, “la
destotalización del mundo moderno exige elimi-
nar la nostalgia del todo y la unidad” (Vásquez
2005:151). El hecho de retomar las vanguardias y
aplicarles el prefijo neo, resulta en implicaciones
que revierten lo antiestético y de cierta manera, lo
ubican en el bloque de lo artístico. Si en las van-
guardias se trataba de romper barreras a través del
arte, en las neovanguardias esto forma parte del
status quo artístico.
La vanguardia histórica y la neovanguardia
están constituidas de manera similar, (...) una
compleja alternancia de futuros anticipados y
pasados reconstruidos; en una palabra, una ac-
ción diferida que acaba con cualquier sencillo
esquema de antes y después, causa y efecto,
origen y repetición. (Foster 2001:31)
En las artes plásticas la vuelta al pasado es ca-
talogada como menos rigurosa y en general esta
mirada hacia atrás, despoja toda connotación de
base fundamentada en teorías e ideologías (Foster
2001:425). La conexión directa empieza a ser cla-
ra con el pasar de las décadas y las neovanguardias
funcionan a pleno en los años 80:
Transvanguardia alude al futurismo italiano,
neoexpresionismo al expresionismo alemán.
En Italia se dieron a conocer movimientos
como los Nuovi-Nuovi, Pittori colti, Anacro-
nisti, Hipermanieristas, que aluden tanto a las
vanguardias italianas, pintura metafísica y fu-
turismo, como al arte del pasado mucho más
remoto –clasicismo de Mengs, barroco, ma-
nierismo–, imitan las formas historicistas y su
iconografía, básicamente mitológica y religio-
sa, convirtiéndose en el estandarte del nihilis-
mo postmoderno. (Keska & López 2009:428)
Las artes visuales y la producción audiovisual se
vieron envueltas en una transformación constante
que estaba influenciada por el collage, el montaje
/ Número 9 / DICIEMBRE, 2019 (99-108)